Los humanos prehistóricos se adelantaron a los europeos al colonizar las Islas Malvinas siglos antes

Científicos e historiadores suponían que la actividad humana no llegó al archipiélago hasta el siglo XVII, pero nuevas evidencias prueban que al menos tres siglos antes ya existían pueblos viviendo allí.

Cráneo de un león marino en las Islas Malvinas / Kit Hamley

Desde que los exploradores europeos en el siglo XVII divisaran por primera vez las Islas Malvinas, la controversia no ha parado: ¿fueron los españoles, los franceses o los ingleses los pioneros en poner sus pies sobre el archipiélago sudamericano? Ahora, un nuevo estudio dirigido por la Universidad de Maine puede tener la respuesta: ninguno de ellos. Porque han encontrado pruebas de actividad humana en dichas tierras siglos antes, al menos 300 años, si bien existen fuertes indicios de que los humanos llegaron a aquellas islas en la prehistoria. Las conclusiones acaban de publicarse en la revista ‘ Science Advances‘.

El equipo caputaneado por Kit Hamley, investigadora de la Fundación Nacional de Ciencia del Instituto de Cambio Climático de UMaine, encontró pruebas que señalan que los indígenas sudamericanos probablemente viajaron a las Malvinas entre los años 1250 y 1420, tal y como apuntan todas las pruebas (basadas en la datación por radiocarbono de restos de carbón y huesos de animales apilados), si bien los investigadores no descartan que el desembarco se produjera antes.

Lo que dice el carbón y los huesos

Los restos de carbón registraron marcas de aumento de actividad de incendios alrededor del año 150 de nuestra era y dos picos abruptos -que podrían significar actividad humana- en 1410 y 1770, esta última fecha coincidiendo con los primeros asentamientos europeos. Pero, ¿y el máximo anterior?

En cuanto a las muestras de huesos, los investigadores recogieron muestras de leones marinos y pingüinos en New Island, cerca del lugar donde se descubrió una punta de proyectil de piedra similar a la que los indígenas sudamericanos han utilizado en los últimos 1.000 años. Los huesos estaban apilados concienzudamente, lo que puede indicar que fueron personas quienes los amontonaron allí.

Estancias cortas

El grupo sostiene la teoría de que los pueblos indígenas visitaron las islas varias veces, pero no se quedaron mucho tiempo, al contrario que los europeos. Como resultado, dejaron pocas pruebas culturales y materiales, aunque suficientes para que el equipo de Hamley encontrase una huella antropogénica y paleoecológica discernible.

«Estos hallazgos amplían nuestra comprensión del movimiento y la actividad indígena en el remoto y duro Océano Atlántico Sur -insiste Hamley-. Esto es realmente emocionante porque abre nuevas puertas para colaborar con las comunidades indígenas descendientes y que crezca nuestra comprensión de los cambios ecológicos en toda la región. La gente ha especulado durante mucho tiempo si los indígenas sudamericanos llegaron a las Islas Malvinas, por lo que es realmente gratificante poder desempeñar un papel para ayudar a que esa parte del pasado cobre vida en las islas».

El misterio del zorro-lobo de las Malvinas

Entre los restos encontrados, el equipo también halló un colmillo de guará zorro-lobo de las Malvinas, una especie de la que se discute ya desde la época de Darwin cómo llegó a las islas. Aunque ahora está extinta -los europeos la cazaron hasta acabar con ella en 1856 y convirtiéndolo en el primer cánido extinto por el hombre actual-, fue bastante prolífica en el archipiélago. Sin embargo, la especie tuvo que llegar en algún momento desde el continente -donde su linaje se perdió antes que en las islas-.

Existe la hipótesis de que los humanos domesticaron a este zorro y lo llevaron con ellos en sus múltiples incursiones. Al datar la fecha del colmillo encontrado entre los restos humanos el equipo se llevó la sorpresa de que correspondían a hace unos 5.000 años, por lo que estos restos pueden apuntalar la teoría de la introducción de la especie de la mano del hombre, según Hamley. Además, en otra expedición anterior, el equipo encontró otras tres muestras de huesos que al ser analizados revelaron que aquellos animales «tenían una dieta que consistía principalmente en depredadores marino como leones y lobos marinos», una dieta similar a los sudamericanos indigenos marinos en tiempos prehistóricos, según los investigadores. Si ebin estos restos podrían haber sido arrastrados por las corrientes, también podrían señalar su relación con los humanos.

«Estamos comenzando a reconstruir el papel que desempeñó la gente en las Malvinas antes de la colonización europea. Debido a siglos de colonialismo en el continente, se perdió gran parte del conocimiento oral sobre este período. La ciencia occidental necesita una actualización, y esperamos que el trabajo futuro se realice en colaboración con los pueblos indígenas actuales, ya que fueron los primeros expertos del lugar», señala Hamley.

ABC