Científicos de la Universidad Estatal de Arizona, en Estados Unidos, sugieren en un nuevo estudio que el fondo marino hidrotermal sería capaz de generar un hábitat especial para el surgimiento y desarrollo de nuevas formas de vida. Estos organismos que logran sobrevivir en la oscuridad de las profundidades del océano no estarían solamente en la Tierra: también podrían constituir una forma de vida extraterrestre en otras planetas del Sistema Solar que dispongan de océanos.
Una fuente hidrotermal o respiradero hidrotermal es una grieta en la superficie de un planeta, de la cual fluye agua caliente. Se localizan habitualmente en lugares que son volcánicamente activos, donde el magma se encuentra relativamente cerca de la superficie del planeta. En la Tierra, las fuentes hidrotermales son abundantes debido a que se trata de un planeta geológicamente activo y con una gran cantidad de agua en su superficie. Una de las variedades conocidas son las fuentes hidrotermales subacuáticas.
En los océanos de la Tierra y de otros planetas
De acuerdo a una nota de prensa, la investigación realizada por los biogeocientíficos Jeffrey Dick y Everett Shock ha derivado en la posibilidad de considerar a estos respiraderos hidrotermales subacuáticos como un hábitat potencial de nuevas formas de vida. Así lo establecen en su estudio, publicado recientemente en Journal of Geophysical Research: Biogeosciences. Si tenemos en cuenta que diferentes teorías sostienen que algunos planetas del Sistema Solar contienen océanos y que otros astros podrían tenerlos en otros sectores de la Vía Láctea, es evidente que estas fuentes hidrotermales podrían albergar también vida extraterrestre.
Según los investigadores, existen razones geoquímicas fundamentales para que los entornos que rodean a los sistemas hidrotermales submarinos se transformen en puntos críticos para el desarrollo de nuevos organismos, en comparación con las condiciones existentes en los sedimentos del fondo marino y otras áreas similares.
Como en las profundidades de los océanos las condiciones necesarias para la vida son radicalmente diferentes a las que se pueden encontrar en la superficie de la Tierra, los organismos buscan un “oasis”: una zona en la cual determinadas características confluyan para que el desarrollo de la vida sea más sencillo y prometedor.
La compleja vida submarina
En los ecosistemas microbianos de aguas profundas, los organismos prosperan cerca de los respiraderos hidrotermales, donde los fluidos calientes se mezclan con agua de mar extremadamente fría: allí se pueden generar condiciones en las cuales las moléculas básicas de la vida y otras formas más complejas logran crecer y reproducirse.
En la superficie de la Tierra, las moléculas de los alimentos que consumen las distintas formas de vida son inestables en presencia de oxígeno. Es esa inestabilidad la que aprovechan nuestras células para crecer y reproducirse, en un proceso denominado biosíntesis. Sin embargo, la biosíntesis en las profundidades de los océanos no es tan sencilla: requiere de una serie de condiciones que, según los especialistas estadounidenses, se concretarían en los respiraderos hidrotermales.
Luego de estudiar el comportamiento de un organismo denominado Methanocaldococcus jannaschii y sus características genéticas, los investigadores lograron demostrar que la zona de mezcla de emisiones calientes y agua fría en un respiradero hidrotermal, a una temperatura de 85 grados Celsius, es la región en la cual este organismo y otras formas de vida podrían desarrollarse en las mejores condiciones. Las posibilidades se incrementan en áreas donde los respiraderos están compuestos de rocas con muy bajo contenido de sílice, porque las mismas producen la mayor cantidad de hidrógeno.
En consecuencia, este descubrimiento abre una nueva posibilidad para la identificación de formas de vida desconocidas en las profundidades de los océanos. Si también se comprueba que muchos otros planetas además de la Tierra poseen océanos, las posibilidades de descubrir vida extraterrestre podrían multiplicarse.