Esta nueva teoría sobre cómo nacen los agujeros negros tiene desconcertados a los científicos

“Los agujeros negros no son las cárceles eternas que se pensaba que eran. De un agujero negro pueden salir cosas, hacia el exterior y, posiblemente, hacia otro universo. Así que, si sientes que estás en un agujero negro, no te rindas; hay una salida.” (Stephen Hawking).

En la actualidad, ha habido grandes avances con respecto a la astronomía, como lo son el telescopio James Webb, el descubrimiento de las estrellas de materia oscura, la posible explosión de la estrella Betelgeuse en una supernova o la impactante teoría de que el universo es un ser vivo. Y ahora, te queremos presentar un planteamiento que está revolucionando el concepto del nacimiento de los agujeros negros.

Según la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), un agujero negro es un objeto astronómico con una fuerza gravitatoria tan fuerte que nada, ni siquiera la luz, puede escapar de él. La “superficie” de un agujero negro, denominada horizonte de eventos, define el límite donde la velocidad requerida para evadirlo excede la velocidad de la luz, que es el límite de velocidad en el cosmos. La materia y la radiación son atrapadas y no pueden salir.

Y con ello, han surgido una gran variedad de teorías acerca de los agujeros negros; ya sea con referencia a su comportamiento o sobre su origen. Y es aquí donde queremos hacer énfasis, pues recientemente se está proponiendo una teoría sobre el posible origen de los agujeros negros, en especial de los que son supermasivos. Los responsables de dicha teoría son los científicos chilenos y lo explican por la colisión de estrellas en un centro galáctico.

¿De qué trata esta revolucionaria teoría?

Como lo comentamos anteriormente, un grupo de científicos chilenos propone el origen de los agujeros negros supermasivos que habitan en el centro de las galaxias, como lo es Sagitario A de la Vía Láctea.

Los científicos han determinado que un agujero negro nace cuando una estrella de masa media muere y colapsa sobre sí misma. La enorme cantidad de materia del cuerpo celeste se comprime tanto, que provoca fuerzas gravitatorias lo suficientemente elevadas como para impedir que la luz escape de su zona de influencia. Por norma general, entre más grande es una estrella, más grande será su agujero negro supermasivo.

Sin embargo, este equipo de científicos latinoamericanos propone que existe una segunda forma en la que podrían nacer los agujeros negros y es por los cúmulos estelares nucleares, en donde interactúan grupos de estrellas de menor tamaño, que podrían unirse y formar inestabilidad gravitacional, para finalmente resultar en uno de estos fenómenos espaciales.

“El hallazgo implica la existencia de una masa crítica para los cúmulos estelares nucleares, que si se supera, existiría una inestabilidad producida por el choque constante entre estrellas, la que puede llegar a formar un agujero negro”, así lo indicó Andrés Escala, astrónomo de la Universidad de Chile.

Para su reporte, los científicos crearon una simulación por computadora, donde observaron la evolución de los cúmulos estelares del centro de las galaxias. Gracias a la supercomputadora Kultrun, de la Universidad de Concepción en Chile, predijeron el crecimiento y las colisiones entre estrellas y más materia. Matemáticamente hablando, la suma de varias estrellas también podría explicar el surgimiento de agujeros como el Sagitario A, cuya naturaleza todavía es un misterio.

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