¿Entraron los primeros americanos por el Pacífico?

Los colonos pudieron tomar una ruta costera alternativa desde Alaska hace unos 17.000 años, según una nueva investigación.

Trabajo de campo en las islas Alexander / Jason Briner

La primera colonización de América es, sin duda, una de las migraciones más fascinantes e intrigantes de la historia de la humanidad. El relato más aceptado dice que los seres humanos llegaron al continente desde Asia a través de un antiguo puente terrestre que abarca el estrecho de Bering, sumergido al final de la última glaciación, para después introducirse, también a pie, por Canadá. Pero esa posibilidad no convence a todos los investigadores. Un grupo de la Universidad de Buffalo (EE.UU.) cree que, en realidad, sus primeros compatriotas tomaron una ruta costera diferente, que transcurría a lo largo de la frontera del Pacífico en Alaska hace unos 17.000 años. Lo explican en la revista «Science Advances».

En efecto, en los últimos años, distintas evidencias han puesto en duda la teoría más aceptada de que los humanos poblaron América del Norte al tomar una ruta hacia el interior a través de Canadá. Para hacerlo, tendrían que haber caminado a través de una estrecha franja de terreno sin hielo que apareció cuando dos grandes capas heladas comenzaron a separarse. Pero investigaciones recientes sugieren que si bien este camino se pudo haber abierto hace más de 14.000 años, no desarrolló suficiente diversidad biológica para sustentar la vida humana hasta hace unos 13.000 años.

Eso choca con los hallazgos arqueológicos que sugieren que los humanos ya vivían en Chile hace unos 15.000 años o más y en Florida hace 14.500 años. Así que tuvo que haber otro camino. Para los autores del nuevo estudio, la teoría de la migración costera desde Alaska puede ser la solución al misterio.

Para llevar a cabo su estudio, los científicos viajaron a cuatro islas dentro del archipiélago de Alexander que se encuentran a unas 200 millas al sur-sureste de Juneau. Los investigadores tomaron muestras de las rocas que, están convencidos, una vez estuvieron cubiertas de hielo. Gracias a un método denominado datación por exposición superficial, que detecta los químicos acumulados por la radiación cósmica cuando la roca está expuesta, pudieron determinar durante cuánto tiempo las rocas, y las islas en su conjunto, estuvieron libres de hielo.

Segun explican, hace unos 17.000 años, los glaciares antiguos retrocedieron, exponiendo las islas del archipiélago Alexander del sur de Alaska al aire y al sol y, posiblemente, a la migración humana. «Nuestro estudio proporciona algunas de las primeras pruebas geológicas de que una ruta de migración costera estaba disponible para los primeros humanos a medida que colonizaban el Nuevo Mundo», dice Alia Lesnek, primera autora del estudio. «Había una ruta costera disponible, y la aparición de este nuevo terreno sin hielo pudo haber estimulado a los primeros humanos a migrar hacia el sur», subraya.

Huesos de foca

Los hallazgos no significan que los primeros colonos cruzaran definitivamente la costa sur de Alaska para extenderse a las Américas: el proyecto examinó solo una sección de la costa, y los científicos tendrían que estudiar múltiples ubicaciones a lo largo de la misma para sacar conclusiones más firmes. Aún así, según sus autores, el trabajo es emocionante porque sugiere que la teoría de la migración marítima es viable.

Unos huesos de foca de hace 17.000 años previamente descubiertos en una cueva cercana por otros investigadores proporcionan pistas que indican que el área era capaz de sustentar la vida humana en el momento en que los primeros colonos podían haber estado de paso. Desde luego, esta evidencia, aunque no la demuestra, sí acompaña a la teoría de los investigadores. La historia de cómo conquistamos a América puede ser más compleja de lo que creíamos.

ABC