El ingeniero que nos protege de los ‘hackers’ armado con tecnología cuántica

El barcelonés Carlos Abellán ha desarrollado un chip que combina tecnología fotónica y cuántica, capaz de generar códigos impredecibles para proteger cualquier dispositivo conectado y que nadie sería capaz de descifrar. La tecnología se podrá usar en los equipos actuales y en los futuros ordenadores cuánticos.

Carlos Abellán en el laboratorio de Quside con su chip cuántico Qupic.

Carlos Abellán (Barcelona, 1990) es fundador y consejero delegado de Quside, una spin-off del Instituto de Ciencia Fotónicas (ICFO). Este ingeniero de Telecomunicaciones y doctor en Fotónica fue uno de los elegidos en la última edición de Innovadores menores de 35 años de MIT Techology Review en Europa. El galardón reconoce a jóvenes cuyo trabajo marcará los avances tecnológicos de las próximas décadas.

Los chips cuánticos de Quside se pueden instalar en cualquier equipo conectado para logar una encriptación indescifrable

El campo en el que Abellán está innovando es el de la seguridad informática y de las comunicaciones. No solo de los equipos actuales, también poniendo la vista en los futuros ordenadores cuánticos, un ámbito por el que grandes grupos como IBM ha apostado con fuerza.

“Los actuales sistemas de encriptación son muy limitados en un mundo con todo tipo de aparatos conectados a la red y con una cantidad creciente de información almacenada en la nube”, comenta a Sinc.

Según explica, Quside usa la más moderna tecnología de integración fotónica para diseñar y producir componentes que generan números aleatorios a una velocidad de miles de millones de bits por segundo. Estos dispositivos pueden ser instalados en cualquier equipo que esté conectado a la red para proteger sus datos y comunicaciones”.

Encriptación segura para hoy y mañana

Los dispositivos se podrán integrar en servidores, móviles, tabletas, coches autónomos, casas inteligentes, drones… “El potencial de negocio es enorme”

“La mayor ventaja de utilizar tecnología cuántica como la nuestra es que nos aseguramos de que los números generados que se usan para encriptar la información y su transmisión son aleatorios de verdad y, por tanto, impredecibles para cualquier hackerEsto garantiza que las claves de protección serán seguras no solo hoy sino también en el futuro”, destaca.

La tecnología está disponible en el mercado en forma de una tarjeta llamada Qucard que se puede instalar el los equipos. La empresa también ha desarrollado un chip fotónico, que utiliza la luz en lugar de electrones, al que han denominado Qupic, que aún está en fase de prototipo.

Ambos dispositivos se podrá integrar en servidores, móvilestabletascoches autónomos, casas y oficinas inteligentes, drones, etc. En general, cualquier equipo conectado a internet. “El potencial de negocio es enorme”, subraya el ingeniero.

La compañía tiene entre sus clientes a fabricantes de dispositivos para centros de datos y empresas de telecomunicaciones, que usan su tecnología cuántica para mejorar los sistemas de encriptación que utilizan sus productos.

Carlos Abellán, fundador y consejero delegado de Quside. / Domenico Tulli

El reto de la computación cuántica

Otro de los desafíos a los que se enfrenta el sector de la seguridad informática y de comunicaciones es la computación cuántica.

“Los algoritmos de ciberseguridad actuales se consideran seguros porque son muy complicados de descifrar para un ordenador convencional. Pero la enorme potencia de los computadores cuánticos podría resolverlos sin problemas”, destaca Abellán.

Si hoy existiera un ordenador cuántico con suficientes qubits, todas las comunicaciones en internet quedarían desprotegidas. “Nuestra tecnología garantizaría su seguridad”

Si hoy existiera un ordenador cuántico con suficientes qubits (quantum bits), todas las comunicaciones en internet quedarían desprotegidas. Por tanto –señala– “sería necesario integrar y desplegar soluciones basadas en productos como los nuestros antes de que la seguridad de nuestras comunicaciones colapse, y así garantizar la seguridad on line a largo plazo”.

El campo en el que trabaja Quside es muy emergente y, por ello, tiene aún pocos rivales. “Existen varias propuestas en el ámbito investigador. El competidor más grande en industria es la empresa suiza ID Quantique, que firmó recientemente un acuerdo con la compañía de telecomunicaciones coreana SK Telekom”, subraya.

El objetivo que se ha marcado la firma –que en la actualidad cuenta con una plantilla de ocho empleados– para los próximos años es escalar la tecnología para que sus chips se puedan integrar en todo tipo de dispositivos a un coste asequible.

Investigación europea

Quside fue creada a comienzos de 2017 para comercializar la tecnología que Carlos Abellán y su equipo habían desarrollado en el ICFO, un centro de investigación líder en el campo de la fotónica. La empresa continúa colaborando con esta institución “para seguir invirtiendo en investigación básica como herramienta para la innovación y la generación de nuevos productos”, dice el emprendedor.

Además, Quside forma parte de dos consocios dentro del FET Quantum Flagship de la Comisión Europea, un programa que cuenta con una subvención de 1.000 millones de euros para los próximos diez años, con el objetivo de situar a Europa entre los líderes mundiales en tecnología cuántica.

En concreto, la firma española forma del proyecto QRANGE, enfocado en la industrialización de generadores cuánticos de números aleatorios como elemento básico de los sistemas de encriptación. También trabaja en la iniciativa CiViQ, que se centra en el desarrollo de sistemas de distribución de llave cuántica  basados en una tecnología conocida como variable continua, compatible con las redes de telecomunicaciones.

SINC